El Salar de Uyuni es uno de los destinos más fascinantes del mundo, pero para disfrutar al máximo esta experiencia única, es importante planificar y prepararse adecuadamente. Este artículo extenso aborda desde aspectos prácticos hasta detalles específicos para viajeros que buscan optimizar su visita.
Planificación anticipada y elección de la agencia adecuada
Reservas:
El Salar de Uyuni es un destino muy popular, especialmente durante la temporada alta (junio-agosto y diciembre-marzo). Reservar con al menos dos meses de antelación te asegura un lugar en los tours más destacados.
Agencia de confianza:
Optar por una agencia que priorice la seguridad y sostenibilidad es clave. Pregunta si sus vehículos están equipados para terrenos extremos y si los guías tienen formación en primeros auxilios y conocimiento profundo del área.
Qué esperar en cada temporada
El Salar de Uyuni tiene dos caras distintas:
- Temporada seca (abril-noviembre): El suelo compacto permite explorar áreas remotas y realizar actividades como trekking o ciclismo.
- Temporada de lluvias (enero-marzo): El famoso “efecto espejo” se da cuando la superficie se cubre con una fina capa de agua. Aunque algunos lugares pueden ser inaccesibles, la experiencia visual es inigualable.
Preparación física y salud
Aclimatación:
El Salar se encuentra a 3,650 metros sobre el nivel del mar. Si vienes de una zona de menor altitud, pasa al menos dos días en Uyuni para evitar el mal de altura.
Hidratación y alimentación:
Lleva una botella reutilizable para agua y snacks energéticos como frutos secos o barras de cereales. Evita comidas pesadas antes del tour.
Ropa y equipo esenciales
El clima en el Salar puede variar significativamente entre el día y la noche.
- Ropa en capas: Camisetas térmicas, chaqueta impermeable y pantalones resistentes al viento.
- Accesorios: Gafas de sol polarizadas, guantes térmicos y gorro.
- Equipo fotográfico: Lleva baterías extra y un trípode para capturar el cielo estrellado.